La agencia espacial de EE.UU. puso por primera vez en la historia un satélite en la órbita del vecino planeta. Buscará hielo donde, tal vez, encuentre restos de vida.
La NASA cumplió hoy otro hito al poner por primera vez en la historia un satélite en la órbita de Mercurio, que dará nuevas pistas sobre los orígenes del sistema solar e irá en busca de hielo donde, tal vez, encuentre restos de vida.
La sonda Messenger (acrónimo de la misión Mercury Surface, Space Environment, Geochemistry & Ranging), que partió hace seis años y medio, entró en la órbita de Mercurio a las 01.09 GMT del viernes, tal y como estaba previsto.
Las primeras imágenes se podrán ver hasta finales de mes, cuando los ingenieros comiencen a probar los instrumentos de la sonda, y la misión de exploración comenzará oficialmente el 4 de abril, explicó a Efe, Tony Carro, director de la misión.
La sonda va equipada de espectrómetros en varias bandas (rayos gamma, neutrones, rayos x), que permiten observar la composición tiene la superficie, un instrumento que mide el plasma, las partículas del espacio, un altímetro por láser y varias cámaras.
"Es una misión muy completa" aseguró Carro, quien lleva involucrado en este proyecto más de 12 años y que está deseando ver el que será el momento "culminante" de tanto trabajo.
Antes de lograrlo, la nave tuvo que hacer una difícil maniobra que empezó a las 20.45 del jueves hora de la costa del este de EE.UU., (00.45 GMT del viernes) y concluyó 15 minutos más tarde.
El motor más potente, de 660 newton, se encendió para desacelerar la velocidad de la nave y que pudiera ponerse en una órbita muy elíptica que irá desde los 200 kilómetros hasta los 15.000 kilómetros, explicó.
La NASA cumplió hoy otro hito al poner por primera vez en la historia un satélite en la órbita de Mercurio, que dará nuevas pistas sobre los orígenes del sistema solar e irá en busca de hielo donde, tal vez, encuentre restos de vida.
La sonda Messenger (acrónimo de la misión Mercury Surface, Space Environment, Geochemistry & Ranging), que partió hace seis años y medio, entró en la órbita de Mercurio a las 01.09 GMT del viernes, tal y como estaba previsto.
Las primeras imágenes se podrán ver hasta finales de mes, cuando los ingenieros comiencen a probar los instrumentos de la sonda, y la misión de exploración comenzará oficialmente el 4 de abril, explicó a Efe, Tony Carro, director de la misión.
La sonda va equipada de espectrómetros en varias bandas (rayos gamma, neutrones, rayos x), que permiten observar la composición tiene la superficie, un instrumento que mide el plasma, las partículas del espacio, un altímetro por láser y varias cámaras.
"Es una misión muy completa" aseguró Carro, quien lleva involucrado en este proyecto más de 12 años y que está deseando ver el que será el momento "culminante" de tanto trabajo.
Antes de lograrlo, la nave tuvo que hacer una difícil maniobra que empezó a las 20.45 del jueves hora de la costa del este de EE.UU., (00.45 GMT del viernes) y concluyó 15 minutos más tarde.
El motor más potente, de 660 newton, se encendió para desacelerar la velocidad de la nave y que pudiera ponerse en una órbita muy elíptica que irá desde los 200 kilómetros hasta los 15.000 kilómetros, explicó.
Comentarios
Publicar un comentario
Deja tu comentario